A pesar de entrar ya en otoño, el día amaneció con un sol radiante y un calor propio de agosto más que de octubre. Un día fantástico para una pareja fantástica.

Rafael y su mujer, dueños de Celebraciones Yedra, nos recibieron bien temprano para montar y dar los últimos detalles a una boda-bautizo que nos esperaba en unas horas.

Y es que, además de casarse nuestros queridos novios Ildefonso y Lola, celebramos el bautizo de Manuel, un niño adorable que hacía las delicias de todos simplemente con mirarte.

Todos los invitados, se reunieron en el cóctel de bienvenida en el maravilloso jardín a las puertas del salón. Un pequeño chiringuito albergaba cualquier bebida para sofocar la sed y el calor, y pequeños bancos permitían disfrutar del momento mientras, uno tras otro, los camareros iban sirviendo diferentes aperitivos de los que destacaban unos riquísimos buñuelos de bacalao.

Se estaba tan a gusto, que uno de los invitados se nos acercó dándonos las gracias porque la sesión musical había sido el complemento perfecto para él entre el jardín, el sol, la comida, la bebida y los demás invitados.

Poco a poco, llegada la hora de pasar al banquete, todos fueron pasando hacia el salón subiendo por las escaleras cuya mitad contenía un pequeño estanque con una tortuga enorme creando un rincón que no pasó desapercibido para hacerse fotos.

Y llegó el momento en el que Lola e Ildefonso hicieron su entrada triunfal, tras la presentación de Quique Sánchez, cortando la cinta que inauguraba uno de los mejores días de sus vidas, entre vítores y aplausos.

Sentados en la mesa presidencial, recibieron el primer plato con “No dejes de Soñar” y las luces titilantes de las bengalas.

A continuación, con la guasa que caracteriza a Quique y cuando hay novios e invitados que se prestan a eso y tal y como quería nuestra Lola… Llegó el momento de levantar de las mesas a familia y amigos de cada uno.

Primero la familia de Ildefonso, lió un taco bueno; luego la de Lola lo dio todo, incluido el padrino y hermano de la novia que, aun estando en la mesa presidencial, bailó como el que más y finalmente los amigos de la pareja terminaron de desatar la locura.

Los regalos: un apartamento en Alicante, un Renault Clio Nuevo y una PlayStation 6 se convirtieron en una caja roja de bombones para el ganador de cada categoría que cual azafata me encargué de entregar.

Momentos divertidos y tiernos a partes iguales, con la entrega de los regalos a las madres. Son palabras bonitas siempre las que salen del corazón y el agradecimiento de Lola e Ildefonso a las mujeres que les dieron la vida nos hicieron llorar a todos.

Al igual que la entrega de varios ramilletes a las amigas más importantes para Lola, como a la que desde hace poco ya es su nueva hermana, su cuñada.

Tras todo esto llegó el esperado corte de la tarta.

Y llegó el precioso baila de los novios, seguido, a petición de ellos, de los famosos pasodobles.

Ildefonso quiso sorprender a su mujer con un vídeo en mitad de la barra libre y el sorprendido también fue él, al proyectarles Rafael, un segundo vídeo que habían preparado con todo el cariño sus amigos contando cómo y cuándo conocieron a la pareja.

Y para seguir con la fiesta, todos volvieron a pasar a la zona de barra libre dónde Quique hizo su magia para levantar a la pista con la música más actual, peticiones varias, dedicatorias como el “Baila Conmigo” a los supercamareros entre los que se encontraba nuestro “Juan Magan” particular y el momento más esperado de Ildefonso con el Breakbeat más cañero que disfrutaron en los últimos momentos de la ya entrada noche.

En definitiva, un día de diez para recordar.

La marcha no paró, ni las ganas de disfrutarla.

Sed felices y no dejéis de soñar.